¿Cuáles son las etapas de evolución motriz de tu bebé?

Conocerlas te ayudará a trabajar con él en su desarrollo. ¡Es muy sencillo!

     

El desarrollo de tu bebé durante los primeros años de vida es maravilloso: pasa de dormir al calor de tus brazos a convertirse en un explorador con ganas de brincar, jugar y descubrir todo lo que lo rodea. Una parte fundamental en este periodo es el movimiento. Él no lo sabe pero, al moverse despierta sus sentidos y habilidades de atención, observación y coordinación. ¿Quieres ayudarlo? Es muy simple pues, de acuerdo con su edad, puedes ayudarlo con juegos y ejercicios que promueven su desarrollo óptimo. Mira:

 

Entre 5 y 6 meses  

Comienza sus primeros movimientos de desplazamiento reptado. Con un poco de ayuda, puede mantenerse sentado, sin apoyo, durante unos segundos. Un ejercicio excelente para él son las volteretas: acuesta a tu bebé boca abajo y ayúdalo poco a poco a girar hacia cualquiera de sus costados hasta que pueda quedar boca abajo. Repite del lado contrario un par de veces más, por no más de 10 minutos. Háblale y sonríele para que se sienta seguro.

 

De 7 a 9 meses

Ya puede mantenerse sentado sin apoyo y sostiene objetos con sus manitas. Además, comienza movimientos coordinados para gatear. Para ejercitarlo durante esta etapa, sienta a tu bebé y coloca su juguete favorito lo suficientemente cerca para que intente alcanzarlo. De este modo, estimularás el movimiento de sus brazos y el fortalecimiento de su espalda baja.

 

Entre 10 y 11

Ahora, gatea con absoluta coordinación (¿no te sorprende la velocidad con la que se mueve?). Ese movimiento contribuye con un desarrollo cerebral y cognitivo sano; las articulaciones de sus brazos y piernas se fortalecen y, con tu ayuda, se mantiene de pie. Una forma de estimularlo es armar rutas de gateo con ayuda de juguetes y obstáculos que llamen su atención. Estas sesiones de carrera se convertirán en sus favoritas.

 

12 meses

¡Ahora camina! Lo más importante ahora, es darle confianza para hacerlo. Un reto sencillo y eficaz consiste en promover que se levante a buscar objetos o juguetes a distancia. El objetivo es que sienta la necesidad de ponerse de pie. Para incorporarte al juego, tiéntalo con el reto de llegar primero al objeto. También puedes seguirlo mientras camina, alcanzarlo y detenerlo con mucha ternura y cuidado, mientras trata de quitarse tu abrazo  para seguir su camino. Recuerda que, si cae, una sonrisa y el ánimo que manifiestes para que se levante, le confirmarán la seguridad y confianza que pones en él.

 

13 a 18 meses

Es tan seguro con sus movimientos que su andar es más rápido: trata de correr, se sienta en sillas por si mismo y despierta su interés por alcanzar lugares más altos. Hagan este ejercicio: colócate en las base de unos escalones y motívalo a subir. Acompáñalo muy de cerca, de modo que sienta que aunque estás cerca, sólo intervendrás en caso de ser necesario. Su equilibrio y movimientos de coordinación se ejercitarán.

 

19 a 24 meses

Tu bebé ya es un explorador: camina, corre, sube escaleras, toma objetos y los transporta de un lugar a otro y todo, gracias a ti. Es momento de buscar juegos más elaborados, incluso, elegir otras actividades físicas, como el ejercicio ligero o el baile. El tratará de imitar lo que hagas, por lo tanto, si ve que te ejercitas, te seguirá. Si ve que bailas, tratará de seguirte. Date tiempo para compartir esto con él. ¡No te arrepentirás!