¿Por qué a mi bebé le llora un ojo?

Hay bebés a los que constantemente les llora un solo ojo. Descubre a qué se debe y cómo puedes ayudarlo.

¿Has notado que a tu bebé le llora constantemente un solo ojo? Esto se debe a la epifora, un lagrimeo que se presenta por exceso de producción de lágrima o falta de limpieza de la misma.

 

Esta producción abundante de lagrimeo ocurre por diferentes motivos, el más común es la irritación causada por abuso de la televisión u otro tipo de pantallas. También puede ocurrir por golpes, arañazos y conjuntivitis nerviosa o alérgica.

 

Para remediarlo, los oftalmólogos recetan lavar el ojo del bebé con suero fisiológico ocular, aunque también podría necesitar antibiótico en caso de infección.

 

Otra causa que es menos común es la del lagrimal obstruido, más recurrente en los recién nacidos. Según especialistas, el lagrimal obstruido se soluciona sin medicación y con el paso del tiempo, pero si dura más de un año con el problema, necesitará tratamiento oftalmológico.

 

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El lagrimeo también puede deberse por cosas más simples como arenilla o pelusas en su ojo. Es necesario que no se toque o rasque, que mantenga su ojo cerrado un par de minutos y el mismo lagrimeo se encargará de expulsarlo.

 

Para evitar que tu bebé no sufra epiforas, mantén limpias sus manitas para que no se toque sus ojos con suciedad; también evita que vea por mucho tiempo la televisión o la tablet, y que cuando lo haga sea a una distancia moderada. También recuerda que su pediatra será el más indicado para determinar qué ocurre y cómo ayudarlo.

 

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