Levantar y acostar al bebé

Si no sabes cómo cargar a tu bebé, no te alarmes. Aquí te decimos cómo hacerlo.

La primera vez que cargas a tu hijo te da la sensación de que se va a romper. Lo ves tan frágil. Y temes no sostener bien su cabecita o hacerle daño. Pero los bebés no son tan delicados hay que agarrarlos con cuidado, eso sí, pero con firmeza y seguridad. Todos los padres aprenden enseguida a tratar a su nene y en poco tiempo lo alzan, lo pasan de unos brazos a otros y lo visten con soltura.

 

¿Cómo lo cargo?

 

1. Mete una mano debajo de sus brazos y con la otra le sujetas las nalguitas.

 

2. Con movimientos suaves y precisos, le das la vuelta de manera que su nuca quede bien apoyada en tu antebrazo.

 

3. La mano que lo sostiene por las nalgas no debe retirarse. De este modo el bebé se sentirá cómodo, seguro y relajado.

 

¿Cómo lo acuesto?

 

1. Si el pequeño se ha quedado dormido y deseas acostarlo en su cuna, entonces una mano sujeta su espalda y su cabeza y la otra, las pompas.

 

2. Lo acercas al colchón girando al niño de lado. Tip: si colocas una toalla enrollada detrás de su espalda, evitarás que el pequeñín ruede.

 

3. Enseguida deslizas delicadamente tu brazo para que el bebé descanse en su cuna. Ni se enterará de que lo has soltado.

 

Algunos consejos

 

Lo fundamental al momento de cargar o cambiar de postura a tu bebé es que tanto él como tú y tu pareja se sientan seguros. La única forma de transmitirle confianza es hacerlo con firmeza y decisión. Al niño le encanta estar en brazos y sentir el calor de la piel, ya sea de papá o mamá, así que en principio, a no ser que esté molesto por algo, cuando lo carguen no protestará. Otra cosa será cuando lo acuesten. Pero tampoco deben hacerlo dudosos o con miedo. Unas palabras y unas caricias pueden indicarle que lo van a alzar o dejar en su cunita. Este anuncio cariñoso lo pondrá sobre aviso y no se asustará. Así todo será tranquilidad.