¿Qué necesita el bebé para gatear?

El gateo es un movimiento básico para el desarrollo de tu bebé, por ello es importante estimularlo.

¿Qué necesita el bebé para gatear? Un medio donde hacerlo y un motivo. El motivo es intrínseco, es decir, un bebé sano desea moverse. El medio, de momento, debes de facilitárselo tú. Basta con que tenga espacio para moverse libremente (suelo, suelo y más suelo).  Sí, ese lugar lleno de gérmenes a nuestros pies es imprescindible para que su desarrollo psicomotor siga su evolución natural. 

 

El suelo ideal

 

Para que tu bebé se sienta agusto para gatear, elige un suelo cálido como parquet o la duela. También puedes cubrir su habitación con alfombra o tapetes de goma para que no se resbale y no se enferme (por aquello de que algunos pisos son muy fríos).

 

Enemigos del gateo

 

1. La hamaquita: Cuando el bebé permanece mucho tiempo acostado se convierte en un espectador pasivo en lugar de ser un pequeño explorador.  Es una cuestión emocional, pero también física, cada bebé nace con un determinado tono muscular, pero los músculos se desarrollan con el movimiento y un bebé acostado apenas se mueve. No se trata sólo de los músculos: el sistema nervioso central y periférico dependen del movimiento para desarrollarse. Usa la hamaquita cuando verdad el bebé lo necesite. 

Foto: Pinterest

 

2. Sentarlo antes de tiempo. Sentarlo cuando tú crees que ya debe hacerlo no tiene ningún beneficio para el bebé, ya que inhibe el uso de músculos fundamentales así que evita hacerlo hasta que él se siente solo, algo que ocurre entre los 8-9 meses de vida. Algo que sucede cuando sientas al bebé antes de tiempo es que empiece a desplazarse sentado y no aprenda a gatear.

 

3. Ponerlo de pie antes de tiempo: Muchos papás cuentan que su bebé no quiere gatear y solo caminar, esto suele ser consecuencia de falta de espacio. Para que el gateo sea estimulante el pequeñín debe poder explorar lugares, no suena tan divertido dar mil vueltas en la misma habitación.

 

4. La andadera: Las piernas no están listas para cargar el peso, ni la espalda, y el bebé adopta una postura antinatural (anda semisentado). Está comprobado que las andaderas no aportan ningún beneficio al bebé. Incluso en ciertos países como Canadá está prohibido su uso por el número de accidentes que provocaban.