5 posturas para dar pecho a tu nene

Una buena posición previene las grietas en el seno y permite al bebé succionar correctamente.

Para que la lactancia funcione, es fundamental empezar bien. El peque que no succiona correctamente suele pasarse mucho tiempo al pecho porque no recibe casi alimento y acaba cansado e insatisfecho (y la mami dolorida), y al rato vuelve a reclamarlo con el mismo resultado. Así comienzan en muchos casos las temidas grietas y las molestas retenciones de leche, que si no se alivian a tiempo pueden derivar en una dolorosa mastitis. Por ello, es esencial adoptar una buena postura que sea cómoda para la mamá y para el bebé. Padres e hijos te deja las 5 mejores posturas para una lactancia efectiva.

1. Bien agarrado. El bebé debe tomarse correctamente para que la succión sea eficiente. Estará bien agarrado si no se ve el pezón ni la mayor parte de la areola, ya que la lengua queda debajo. Al succionar, se puede observar cómo mueve la mandíbula.

2. Posición de cuna. El cuerpo del peque debe quedar girado hacia la madre, no solo la cabeza. Con la espalda bien apoyada, la mamá acercará al bebé a su pecho (si hace falta puedes usar un cojín de lactancia). Un recién nacido tiene que estar muy pegado.

3. Balón de rugby. Acostado con las piernas paralelas a la mami, el bebé mama boca abajo. Esta postura ayuda a vaciar todos los conductos del pecho. Es útil para amamantar a dos niños a la vez o si hubo cesárea, así el pequeño no roza la cicatriz.

4. La más natural. La mamá sostiene el bebido sobre el regazo, de forma que el peso del peque recae sobre su propia pancita y la de ella. Esta posición, que adopta el recién nacido de forma natural, puede ayudar a los nenes (que se enganchan mal o se cansan de comer) a succionar mejor.

5. Casi vertical. Esta postura, con el bebé casi vertical, facilita el contacto visual madre-hijo. Es útil cuando el niño succiona muy deprisa y se atraganta (puesto que se atragantan menos en posición vertical que horizontal).