Qué hacer si tu pequeño no quiere comer
Descubre los factores por los cuales tu hijo no tiene apetito y cómo puedes ayudarlo.
Descubre los factores por los cuales tu hijo no tiene apetito y cómo puedes ayudarlo.
Cuando somos niños, siempre hay un alimento que no nos gusta, o nos cuesta comer. Normalmente le tomamos gusto a la comida conforme vamos creciendo. Sin embargo, hay niños que son más ?melindrosos? que otros, pero puede ser por distintos factores.
En primer lugar, algunos alimentos suelen caerles pesado a los pequeños. Es necesario diferenciar si la inapetencia se debe a un problema de salud o a un mal hábito alimenticio.
Los malos hábitos alimenticios se forman de diferentes factores: comer a deshoras, ingerir golosinas antes de comer o falta de antojo por la comida que le sirven. Para que tu pequeño haga buenos hábitos, debes armarte de paciencia y evitar castigos físicos como dejarlo sin comer, darle premios si se come todo o amenazarlo, ya que verá la comida como un castigo.
Es importarle darle alimentos variados a un niño inapetente. Esto permitirá que conozca diferentes sabores y pueda combatir poco a poco su inapetencia. Además, éstos deben ser de calidad para que no corra el riesgo de perder peso y talla.
Puedes ayudarlo de manera creativa: presenta su comida con formas divertidas y en platos coloridos. Así relacionará la hora de la comida con un momento ameno y divertido.
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Dale de desayunar de forma ligera, con frutas jugo o leche. En la comida incluye regularmente pescado, ya que es nutritivo y de fácil digestión. Te recomendamos filetes para evitar las espinas.
También evita que cene pesado, así impedirá la mala digestión. Los cereales son ideales para los pequeños.
No le pidas a tu hijo que se acabe todo el plato. En ocasiones creemos que cantidad es igual a calidad. Muchas veces los pequeños se satisfacen de manera más rápida y forzarlo a comer podría traerles otros problemas como sobrepeso.
Recuerda que es muy importante establecer horarios para las horas de comida, así evitarás el sedentarismo. Y sobre todo: procura que estos momentos sean familiares. Platiquen de manera agradable mientras comen y préstales atención a lo que dicen.
Haz de la hora de la comida un momento agradable, así tu pequeño crecerá saludable y feliz.
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