Mira el mal que hacen los hisopos en los oídos de los niños
Un experto explica que no se deben usar hisopos de algodón para limpiar el canal auditivo.
Aunque no se puede descartar al hisopo como una herramienta valiosa en la procuración de una limpieza efectiva en los oídos, pueden convertirse en todo lo contrario si se ocupan de manera inadecuada en los niños.
En general los hisopos son recomendados para quitar un exceso de agua o humedad en determinadas áreas como la parte externa de la oreja. Pero nunca para introducirlos al oído. En estos casos es necesario que investigues cómo limpiar correctamente los oídos de tu bebé para no cometer errores. Un especialista cuenta el por qué.
“Los dos conceptos erróneos más importantes que escucho como otorrinolaringólogo son que el canal auditivo se debe limpiar en casa y que se deben usar hisopos de algodón para limpiarlo: ambas ideas son incorrectas”, señaló el doctor Kris Jatana, autor del estudio "Visitas al departamento de emergencias pediátricas relacionadas con la batería en los Estados Unidos", del Departamento de Otorrinolaringología Pediátrica del Hospital Pediátrico Nacional en Columbus, Ohio.
Jatana es profesor en el Departamento de Otorrinolaringología-Cirugía de Cabeza y Cuello, en el Centro Médico Wexner de la Universidad Estatal de Ohio, y el Hospital Infantil Nacional. Además está certificado por la Junta Americana de Otorrinolaringología-Cirugía de Cabeza y Cuello.
el especialista explica que la limpieza no es necesaria como se cree y mucho menos con el uso de hisopos, pues normalmente los canales auditivos se asean solos; utilizar algún utensilio para hacerlo podría provocar graves daños.
“Usar hisopos de algodón para limpiar el canal auditivo no solo empuja al cerumen más cerca del tímpano, sino que hay un riesgo significativo de provocar una lesión entre menor y grave en el oído”, explicó el especialista.
Los casos registrados de lesiones de niños ingresados a emergencias -de acuerdo con un estudio federal en Estados Unidos- que se utilizó para los resultados del estudio del Dr. Jatana, el 73% de los casos ocurre por limpiar los oídos con hisopos, mientras que el 10% se debe a jugar con ellos. Un 9% es porque los niños se caen cuando tienen hisopos en los oídos. La gran mayoría de los lesionados que se atienden tienen menos de ocho años de edad, de los cuales el 40% de los casos fueron menores de tres años.
Además, de acuerdo con el estudio, algunas de las lesiones de oído que tu hijo podría padecer, que pueden ocurrir al utilizar hisopos son:
- Tímpano perforado.
- Lesión de tejido blando.
- Sensación de cuerpo extraño.
- También se pueden sufrir mareos, tener problemas de equilibrio y pérdida auditiva irreversible.
El uso de hisopos en los oídos de los niños, por más inofensivo que parezca, puede resultar en más daño que beneficio. Las consecuencias van desde irritaciones menores hasta daños graves en el canal auditivo y el tímpano. Será indispensable que como papá o mamá optes por métodos de limpieza seguros y recomendados por su pediatra.