¿Cómo regular las emociones de mis hijos? Consejos clave cuando se desbordan
Si tu niño/a tiene una avalancha de emociones en puerta, te enseñamos trucos efectivos que les permiten hacer "pausa" para poder enfrentar y controlar sus sentimientos.
Los niños mientras crecen atraviesan una montaña rusa de emociones que pueden ser sumamente abrumadoras.
Desde la alegría desbordante hasta el enojo incontrolable, estas emociones son parte de su día a día, pero la habilidad para regularlas es fundamental para su bienestar emocional a largo plazo. ¿La razón? Los niños que dominan esto pueden tener menos problemas emocionales, como la ansiedad y la depresión en su vida adulta.
Existen estrategias prácticas que permiten acompañar y ayudar a los peques a que descubran cómo autorregularse emocionalmente y a que entiendan a enfrentar las situaciones que pueden detonar sensaciones extremas en ellos.
- Respiraciones profundas de forma divertida
Los adultos sabemos que una de las tácticas más efectivas para poder controlar las emociones es la respiración profunda. No obstante, los más pequeños pueden tener complicaciones al intentarlo, sobre todo si están en medio de un berrinche o una explosión de emociones.
Una gran manera de regular las emociones puede ser a través de las burbujas. Según David Ibrahim, terapeuta matrimonial y familiar de Los Ángeles para el Huffington Post, soplar burbujas es una actividad que enseña a los niños a respirar profundamente.
- Hacer preguntas para entender las emociones
Enseñar el poder del lenguaje a tus hijos será una de las claves para que ellos puedan desbaratar la situación que desató la exaltación de sus emociones y entender por qué está pasando. De esta manera podrán darle "forma" a lo que están sintiendo y entender mejor toda la situación.
Se pueden hacer algunas preguntas como:
- ¿Qué pasó?: al explicar la situación que desató su cúmulo de sensaciones, el adulto podrá ir entendiendo qué pasó y como puede sentirse el pequeño.
- ¿Qué sientes?, ¿estás enojado/triste?: en caso de que el niño no pueda explicar lo que siente, el papá o mamá puede guiarlo para acompañarlo en su emoción.
- ¿Dónde sientes la emoción?: señalando en qué parte lo sienten los hará conectar con su cuerpo y podrán encontrar soluciones con los padres para desahogar la emoción.
Según la psicóloga Rachel Tomlinson, es importante invitarlos a calificar la intensidad de la emoción ya que ese ranking los ayudará a comprender qué habilidades de afrontamiento pueden utilizar en el futuro.
- Cuentos o videos que expliquen por lo que están pasando
Muchos niños no saben decir qué están sintiendo por que no lo habían sentido antes. Por eso, la mejor manera de ayudarlos es enseñándoles cuáles sentimientos existen a través de ejemplos visuales o auditivos. Esto se puede hacer con cuentos cortos o videos educativos que cuenten con personajes que muestren cómo enfrentaron ciertas sensaciones como el enojo o la sorpresa para que así los niños se guíen en el proceso de asimilación de emociones.
- Registro de emociones
Los "check-ins" emocionales permitirá a los niños a que puedan reflexionar sobre sus sentimientos a través de un diario, pintura o juegos entre papás e hijos con preguntas clave. Boys and Girls of America sugieren juegos como crear un "cuadro de emociones" con colores e imágenes para que cada día puedan señalar cómo se sienten o pedirle a los niños a que digan los "Altos y bajos" del día, ya que esto motiva a que los peques piensen en lo mejor y lo peor de su día, así se les da la oportunidad de pensar en sus sensaciones y explicar sus sentimientos.