Mi hijo tiene gripe, ¿qué hago?

La gripe se produce por un virus muy infeccioso, pero con algunas medidas de prevención es muy sencillo combatirla.

La gripe es una infección aguda de las vías respiratorias que afecta de manera especial a las vías superiores.

Existen tres tipos virales (A, B y C); los virus A y B son los que provocan las infecciones humanas, mientras que el C solo se ha dado en casos esporádicos y en brotes muy localizados.

Aunque el virus de la gripe es bien conocido, su incidencia resulta muy elevada desde los primeros años de vida.

Síntomas 

1. Un episodio de gripe leve se manifiesta en forma de tos seca, dolor de garganta, congestión, secreción nasal e irritación de ojos.

2. Puede complicarse con escalofríos, fiebre, cefaleas, dolores musculares y articulares y trastornos digestivos.

3. En los niños, las epidemias de gripe provocan el mayor número de consultas médicas. Suele durar tres días, dejando como secuela un decaimiento.

4. Una de las complicaciones más frecuentes es la neumonía.

Más vale prevenir

1. Es difícil evitar una gripe, sobre todo porque es muy contagiosa por vía aérea (toses y estornudos).

2. La principal prevención es la vacuna antigripal. Su eficacia se aproxima al 70 por ciento en el caso de escolares.

¿Cómo aliviar los síntomas?

1. Para aliviar los síntomas, se recomienda que el niño permanezca en cama unos cuantos días, sobre todo si tiene fiebre.

2. También es importante que el ambiente de la habitación esté húmedo y que beba abundantes líquidos para evitar la deshidratación.

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