Los niños necesitan 12 abrazos para ser felices
Los abrazos son una muestra de cariño y amor hacia tus hijos en la cual no debes escatimar nunca.
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Abrazar es sanador. Un gesto corporal, físico que no necesita de palabras agregadas. Que calma, demuestra afecto, comprensión y contención. Ayuda a los niños a relajarse y cambiar el foco, ya que los trae al presente y los conecta con el amor. Para un niño, recibir pocos abrazos podría significar problemas en el futuro para poder acercarse de forma emocional y asertiva a otras personas.
Los niños necesitan de los abrazos, ya que permiten el contacto físico, principalmente con sus padres. Esta gran muestra de cariño les aporta grandes beneficios físicos e intelectuales pero sobre todo emocionales. Algunos niños tienen una marcada aversión al tacto social, lo que suele darse en las neurodivergencias, como el Trastorno del Espectro Autista (TEA), por lo que siempre deberías checar si a tu hijo le desagrada dar abrazos y que lo abracen, preguntar siempre, buscar consentimiento y pedirle que te exprese lo que siente.
De acuerdo con Alex Duve, docente de educación básica y apasionado divulgador de la educación, los niños necesitan 12 abrazos para ser felices. Pero ¿de dónde saca este docente dicha afirmación?
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En su canal de YouTube comparte la teoría de la psicoterapeuta familiar Virginia Satir (1916-1988), quien mantenía la teoría de que: "necesitamos cuatro abrazos diarios para sobrevivir. Ocho abrazos diarios para mantenernos y 12 abrazos diarios para crecer".
Y, basándose en esta teoría, Duve asegura que, como los niños están en plena etapa de crecimiento, necesitan 12 abrazos al día para ser felices. "Hay terapias como la abrazoterapia que nos ayudan en estos procesos, inclusive ayudan a solucionar problemas de pareja, ya que son procesos sanadores".
¿Qué beneficios aporta al cerebro?
Lo que pasa con un abrazo llega directo al cerebro. "Son sorbitos de amor, como dice una escritora, y ayudan a que tu hijo fortalezca su cerebro. Abrazar a tus niños fortalece su cerebro, ya que un abrazo estimula el cerebro y tiene muchos beneficios", asegura el docente.
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Por lo tanto los beneficios que aporta son:
- Generar alta autoestima.
- Combatir el estrés, porque liberará dopamina, la hormona del placer, y aliviará el estrés.
- Liberar oxitocina, que generará confianza, ya que también es conocida como la hormona del amor.
- Liberar serotonina, presente en las neuronas, que ayuda a las funciones del neurotransmisor. Una baja concentración de serotonina es causa de depresión.
- Reduce el nivel de cortisol -llamada "hormona del estrés"- en la sangre. Inmediatamente después de recibir un abrazo, el nivel de cortisol baja en la sangre.
- Relaja los músculos.
- Fomenta empatía y comprensión.
- Activa los receptores de la piel que aportan serenidad. Este es el nervio vago que va directamente al cerebro y regula la presión sanguínea.
Ya no hay pretextos para no abrazar a tu pequeño, con estos beneficios seguro querrás hacerlo en todo momento. Ten presente los perfiles sensoriales y si tu pequeño lo permite y no le molesta. El fin es compartir cariño con los niños, adolescentes, adultos, y aprovechar los beneficios de esto. El lenguaje del amor que se basa en el cuerpo es uno de los más bonitos y no te costará demostrarle a tu pequeño tu amor incondicional a través de este gesto.
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