3 trucos que no fallan para enseñar a leer a tu hijo

El comienzo de la lectura es una de las etapas más bonitas en la vida de un niño, pues le abre nuevas puertas para su descubrimiento y desarrollo cognitivo. Por esto y más, es muy importante que lo apoyes en su proceso de aprendizaje.

No todos los niños aprenden de la misma manera y no todos tienen el mismo tiempo para hacerlo, por lo que es recomendable que te tomes el tiempo para identificar cuáles son sus fortalezas y debilidades y si tu hijo entiende lo que lee o solo está viendo los dibujos e ilustraciones y saca deducciones a partir de eso. 

Algunos niños aprenderán con facilidad, pero muchos otros -incluidos los niños con hábitos tempranos que pueden indicar que el niño tiene dislexia- necesitarán un tipo de enseñanza específico para aprender a leer con eficacia. 

"Muchas escuelas no utilizan ese tipo de enseñanza o no lo utilizan suficientemente", dice el artículo "¿Cuál es la mejor manera de enseñar a leer a los niños?", de Child Mind Institute.

El artículo especifica que la mejor manera de enseñar a leer se llama enseñanza sistemática basada en la fonética. "Se sustenta en décadas de investigación sobre la ciencia del cerebro. A diferencia del habla, la lectura no es una habilidad que los cerebros de los niños estén programados para desarrollar. Aprender a leer requiere que varias partes del cerebro trabajen juntas". 

Cuando los niños aprenden a leer, aprenden a reconocer las letras impresas, aprenden sus formas, curvas, puntos, y aprenden a relacionarlas con sonidos específicos. Este proceso se llama “fonética”.

Tener algunos ejercicios o juegos a mano te servirán para enseñarle a leer a tu hijo. Te compartimos algunos: 

Libros con frases cortas

Definitivamente, los libros son la mejor herramienta para acercar a tus hijos al mundo de la lectura. Pero estos tienen que ser acordes a su edad.

Una forma de empezar a leer con tu hijo es utilizando libros con frases cortas, las cuales tú vayas leyendo y señalando con un dedo. Juega con tu hijo a completar la frase omitiendo la última palabra, el cual él debe mencionar.

Ejemplo: (frase) El león durmió en la selva

Tú: El león durmió en la…

Tu hijo debe contestar "selva".

Rimas infantiles

Estas son muy buenas para el proceso de aprendizaje de lectura, ya que los niños comienzan a asociar los sonidos que son iguales o se parecen. Muchas poesías están escritas en rima y esto lo hará más divertido. Explora y elige algunos libros de poemas para niños para tener en tu casa y recurrir a ellos frecuentemente. 

Cada semana, haz un letrero grande donde pongas una rima con sonidos repetitivos (por ejemplo: amarillo es el patito, amarillo es el limón, amarillo es el pollito, que sale del cascarón).

Antes de dormir, recita junto con tu hijo la rima de la semana. Es importante que usen el letrero como guía.

Dibujos y cuentos

Esta actividad le encantará a tu hijo. Elige 4 palabras sencillas (por ejemplo: casa, gato, comida, amigo) y pídele a tu hijo que haga un dibujo e imagine una historia con esas palabras. Estas debe escribirlas en el dibujo y, al final, contarte su historia.

Es importante que en esta etapa prestes atención a su desarrollo y aprendizaje para poder identificar si se trata de dislexia y poder consultarlo con su pediatra. En dado caso también puedas buscar específicamente ejercicios para trabajar en casa con niños con dislexia, ya que tu hijo necesitará que estés apoyando en el proceso. Esto permitirá un aprendizaje a su medida.

Leer con tu hijo les dará a ambos tiempo de calidad y será un momento para atesorar, ya que estarás participando de una de las etapas más importantes y divertidas de su vida.